miércoles, 25 de febrero de 2009

EL RUIDO DE LA INFANCIA





Escribo para mí tus gestos,
los marco con la tinta de tu sangre.
Gota a gota regreso lo que es tuyo:
la infancia que me diste, agria y austera.
Te unto el dolor que a mí me toca,
lo hago no por miedo a la astilla más voraz
cuando retire el nervio a mi ternura.

2 comentarios:

leyver dijo...

Yo que vengo huyendo del hielo
de los polos terrestres, de los opuestos,
yo que corro del desvelo,
de escribir de noche por no poder hacerlo.

Y tu tan funeraria, tan paredes grises,
tan cuarto sin ventanas,
tu que has sido calle mojada, espejo roto, pez sin agua,
apenas ayer creí haber encontrado un manantial
y hoy descubro agua salada,
son tan altas las paredes del deseo que es difícil escalarlas
no volveré a intentar tomarte por asalto,
y pienso que es poco probable que tus puertas se abran,
parece un nuevo error de posibilidades
que tu honor de dama frágil
concuerde con mi amor de hombre en celo

Monica Palacios (MOLUV) dijo...

que bonitos!!!!! Rolandito y Lidi... cómo andas bella...